jueves, 27 de diciembre de 2007

pesadillas

Hace pocos dias, en mis sueños se reflejáron algunas conversaciones y preocupaciones recientes.

Ese mismo dia, acababa yo de pagar a los trabajadores que colaboran en nuestro proyecto y aunque en esta ocasion no son muchos, siempre esa actividad me genera un poco de tension por darle a cada uno lo que le corresponde, que no se me olvide deducir los anticipos que le he dao a mediados de mes, contar bien el dinero ( normalmente enormes cantidades de asquerosos billetes sobados de monedas locales devaluadas) y rellenar correctamente las fichas de pago.

Por otra parte, resonaba en algun lugar de mi inconsciente el relato que me habia hecho esa misma tarde una coperante que conoci en otro pais, en otra mision, con otra ong y que ahora trabaja al lado de mi oficina con otra organizacion.

Esta chica, me contó que acabó dimitiendo en su anterior destino. La razon que provocó su dimision fue que su jefe de mision la obligaba a pagar un sueldo mensual a alguien por trabajos que nunca habian sido realizados. El alguien en cuestion resultaba ser un personaje estrechamente relacionado con la "revolucion" que operaba en la zona.

El jefe de mision contaba con esta persona como parte de sus contactos para "adivinar" las zonas donde se producirian ataques de los revolucionarios a fin de evitar mandar a los equipos humanitarios a esas zonas en esos momentos delicados; un buen contacto, sin duda...

Pero no se dignaba a dar como explicacion la que es facil de presumir: Le dan ese dinero al "leader local" fundamentalmente por evitar que la ONG tenga problemas adicionales en una zona que ya de por si contaba con bastantes problemas de seguridad. Esta ausencia de explicaciones le causaba frecuentes pesadillas a mi amiga, que se negaba a dar "money for nothing"...

En mis sueños, el otro dia, yo tenia por delante la jornada en que debia pagar a las personas que trabajan con nosotros. Un gran agobio me invadia pues una fila interminable de personas que no conocia y nunca habia visto en nuestros proyectos me esperaban en mi despacho.

En mis sueños, tenia un asistente que era otro colega humanitario con el que habia tenido muchas discusiones en el pasado, precisamente por su actitud paternalista y monjil mas propia de una organizacion de beneficencia social que de una ong de desarrollo y ayuda humanitaria.

El dialogo que teniamos era algo asi:

"Pobrecitos..."-decia mi asistente-"Fulano tiene 8 hijos y casi todos estan enfermos.."

Si, si! Pero no ha cumplido con su trabajo, se queda en casa cuando le da la gana y ni siquiera nos avisa y ademas tenemos serias razones para sospechar que nos esta "desviando" escandalosamente materiales; asi que creo que no debemos renovar su contrato.


"Que desconfiado eres! Hay que trabajar sobre una base de confianza!
Además, resulta que, si no le renovamos el contrato, su familia va a sufrir mucho, pobrecitos..."


Ya, pero si le renovamos, los que van a sufrir son los beneficiarios de nuestro proyecto: Gentes que no van a recibir lo que deberian recibir...


"pero si no le renovamos el contrato, el "pobrecito" se puede enfadar mucho y como conoce mucha gente aqui, nos puede dar problemas. Es mejor que evitemos esos problemas..."

Se trata de trabajar en una minimas condiciones de eficiencia. Intentar al menos asegurar que con los recursos que tenemos hacemos lo maximo posible...

"Pero esta actitud tuya de querer hacerlo todo bien, a veces, resulta un verdadero dolor de cabeza, una pesadilla... para ti, para tus compañeros..."

¿Sera mejor ser mas flexible y menos exigente?¿Dormiremos mejor?


http://tam-tam-33.blogspot.com

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Caminando por la calle

Afortunadamente, con la organizacion con la que trabajo me puedo permitir, en la ciudad en la que vivo, caminar por la calle. La única restriccion que me imponen es que no puedo caminar a partir de la caida del sol.

Normalmente cada ONG tiene sus normas de seguridad, que varian de una organizacion a otra y dentro del mismo pais de una ciudad a otra: Por ejemplo en Kinshasa ( 8 millones de hab.), no camina por la calle casi ningun cooperante ( sea de la organizacion que sea) pero en cambio en Lubumbashi (1,5 millones de hab) es posible caminar para casi todos los cooperantes, aunque aqui varian las condiciones segun trabajes con una u otra organizacion. (Algunos barrios son prohibidos, hay que ir acompañado, hay que llevar walkytalky, hay que llevar el chaleco de la ong, etc) Yo no tengo ninguna de estas restricciones salvo la nocturna.

Para mi, es un autentico privilegio poder caminar desde casa al trabajo, al colegio de mi hijo, a la oficina de mi mujer. Caminar me permite estar en contacto con la gente, hacer amigos, vivir vida de barrio y sobre todo ser considerado como un MZUGU atípico.

Estos últimos dias no he tenido vehículo, asi que estaba obligado a caminar. Las gentes negras frecuentemente me preguntan por la calle por qué voy andando y de broma les contesto en swahili "por que soy un blanco pobre" ( Mzungu maskini ) a lo cual me responden que eso es imposible: No hay blancos pobres! Los taxistas paran a mi lado pensando que ya han pillado un filón y se extrañan de que quiera seguir caminando bajo este sol de justicia y envuelto a veces en un manto horrible de contaminacion, pues el tráfico abundante suelta abundantes humos negros, grises, blancos...

Las calles sin asfaltar, llenas de baches y piedras, me hacen ir atento para seleccionar donde pongo mis pasos. Con tantas piedras aveces tengo la sensacion de que se me van a romper los zapatos antes de llegar a mi destino. Los coches pasan deprisa y levantan una nube de polvo que me hace taparme la nariz con la camiseta. Cuando llueve tengo que trazar bien para evitar quedar atrapado por los charcos, el barro y los rios que atraviesan las calles.

A pesar de todo, caminar me aporta muchas gratificaciones.

Me paro a recargar el saldo del movil. El vendedor de tarjetas de prepago de vodacom me invita a pasar a su kiosko montado en plena calle con cuatro tablas y unas chapas de cinz. Me explica que es abogado pero tiene que ganarse la vida con la reventa de tarjetas. Y lo de siempre: Mzungu, tienes algo de trabajo para mi?

Unos pasos mas alante otro tipo tiene su oficina compuesta de mesa y silla de plastico en plena calle; sobre la mesa montones de billetes de francos congoleses anuncian su negociado. Me ofrece un taco de billetes de 250.000 FC ( 500 $) y le pregunto haciendo ademan de cogerlos si es un regalo. Se rie desconfiado y me dice que me ofrece el mejor cambio de la ciudad. Misma cancion: Mzungu maskini... Imposible; eso no existe. Le muestro los bolsillos vacios e inmediatamente alguno de sus parroquianos me asigna el nombre de Mr. poche vide.(bolsillo vacio) "Aurrevoire Mr. poche vide..."

Paso delante de un local que esta siendo reformado para abrir un take away libanes ( Sawarma, kebab y pizza arabe) y uno de los paletas que estan haciendo el reboco sale corriendo a saludarme llamandome por mi nombre. Yo no recuerdo su nombre pero le conozco pues hace tiempo trabajaba como obrero "journalier" cargando camiones con nosotros. El jefe del "restaurante", un Libanes gordísimo, al verme hablando con el currela viene a hacerme marketing de su chiringui hablandome en Ingles. "Mumtaz habibi" ( Maravilloso, querido) le respondo. Sorprendido de escuchar dos palabras en árabe me trae un poco de "baklaba" (pastelitos de miel y almendra) de las pruebas que estan haciendo con el horno de la pasteleria y entablamos conversacion sobre Damasco y una discoteca famosa de Libano donde me pase una buena juerga. Me invita a la inauguracion pero no me da la fecha. Mumtaz habibi...

Ya llegando a mi barrio, mi amigo BABA me habla en swahili cada vez que paso cuando llevamos a Saidi al cole. Baba ha montado su negocio con un cubo de plastico y un trozo de gomaespuma. Se dedica a lavar coches utilizando como materia prima el agua que recoge de la cuneta. Casi todos los dias se empeña en enseñarme alguna expresion nueva y a veces lo consigue.

Ya enfrente de la puerta de mi casa, el policia que guarda la residencia de una señora importante que tenemos de vecina, me da los buenos dias como cada mañana y me informa que mi mujer y mi hijo me esperan para comer; gracias y bon apetit. Algun dia tendre que sacarle algo de esas cosas ricas que Coralie prepara pues no tengo muy claro que el señor del Kalachnikov coma todos los dias.

Y asi es mi vida de transeunte. Intento cada mañana que el polvo, la contaminacion, las piedras, los charcos, el barro y demas elementos adversos no me impidan disfrutar de ( como dice la cancion) "las caras lindas de mi gente negra".

Dia internacional del arbol

Medio dia en el barrio NjanNja. El nombre del barrio es pura onomatopella pues dicen que viene del ruido que hacen los trenes que lo atraviesan. Aqui se concentra al aire libre el mercado de la madera de la segunda ciudad del Congo. A estas horas, la actividad es frenetica: Mas que las camionetas y los pickup, son las carretillas (que fabricadas con hierros soldados sobre un viejo eje de coche y tiradas por uno, dos o tres chavalotes) quienes transportan con fuerza humana la mayor parte de las tablas vendidas en el mercado a cualquier punto de la ciudad. Transporte ecologico donde los haya.
Es la hora de la salida de los colegios y uniformes variopintos de diversos colores inundan las calles y las paradas de transporte publico.
Hoy, ademas de los escolares, hay mayoretes con sus gorros de gala y sus galones y ademas otros uniformes, aportados por miembros de varias bandas de musica, dan un punto de color adicional. Color y sonido pues, ademas del ruido de las fanfarres, hay varias camionetas que con grandes altavoces atados con cuerdas a la baca, berrean a volumen butal los grandes exitos de la rumba zairoise del momento compitiendo entre ellas por ver cual suena mas fuerte. Niños de la calle, escolares y otros transeuntes bailan animados sobre las aceras y en medio de la carretera.
Yo me encuentro en medio de un gran atasco mientras indisciplinadas furgonetas ( tipo nissan vanette) atestadas de pasejeros como sardinas en lata, avanzan ocupando el carril contrario y el espacio de los transeuntes adelantandonos por la derecha y por la izquierda. Estoy rodeado de humo negro, humo gris, humo blanco, claxones, musica, fanfarre, silbatos de los guardias urbanos...
Avanzamos lentamente y llegamos a la altura de una gran escuela publica donde los vehiculos oficiales de alguna autoridad politica son escortados por grandes camiones de 20 tn. con el volquete lleno de gentes que danzan festivas al ritmo de musicas mezcladas. Los camiones han sido adornados para la ocasion con ramas de arboles y anuncian con pancartas el motivo de tanto festejo: lubumbashi hoy celebra, lleno de jubilo, el dia mundial del arbol. "Por un mundo mejor pon un arbol en tu parcela."